Es un hecho triste que la mayoria de los alumnos tienen un hueco enorme en su formacion matematica, acabo de calificar un examen de derivadas, los niños se han esforzado y trabajado arduamente, y conceptualmente entienden que es la derivada, sus teoremas, las reglas de derivacion, etc.
Pero por desgracia, sus habilidades algebraicas son malas, son capaces de plantear la derivada, pero no logran desarrollar el algebra asociada, sus errores mas comunes son con las leyes de los signos y el desarrollo de parentesis, los cuales, si se ve con cuidado, no son errores graves, que pueden corregirse, solo es necesario un poco de dedicacion, un curso de regularizacion y un buen maestro que les enseñe esas cosas basicas.
Los examenes no siempre son buenos indicadores del conocimiento de un alumno, los factores emocionales son inconmensurables y pueden alterar gravemente su comportamiento en el examen, me ha tocado ver buenos alumnos que se congelan de pavor ante un examen. El mismo concepto de asignarle un valor numerico a la cantidad de conocimientos de un alumno me parece discutible.
Personalmente creo que es mejor un examen oral, siempre y cuando el profesor haya tenido cuidado de darle confianza al alumno y no ser considerado una figura destructora; es mas facil ver el procedimiento intelectual de un alumno cuando se habla con el.
Por desgracia este sistema seria inoperante en grupos grandes, por lo que es necesario hacer examenes masivos, ahora bien ¿como diseñar un buen examen?; debe de ser claro y contundente, de preferencia con 10 o 5 preguntas, dependiendo del tiempo del que se disponga, a mi en particular me gusta combinar, con la mitad de las preguntas conceptuales y la otra mitad ejercicios numericos.